domingo, mayo 10

Renuncia al resultado




En estos tiempos y siempre, la renuncia al resultado es una asignatura obligatoria a aprender. En las técnicas de yoga existe Sanyasa y Tiaga, son diferentes pero van unidas. La primera nos habla de renunciar al resultado, no busques ningún fruto, ninguna recompensa futura de lo que haces. La segunda nos dice que disfrutes de la acción por todo lo que ella te aporta, desarrollando nuestro potencial y sacando el máximo provecho posible.

En el momento que nos olvidamos de conseguir un resultado, podemos intalarnos en la presencia y desaparece el miedo, la ansiedad, la prisa… todo aquello que nos impide estar en lo que hacemos, ganando así concentración y creatividad para hacer las cosas de forma diferente. Einstein decía que en momentos de crisis es más importante la imaginación que el conocimiento. Con la imaginación, que no es lo mismo que la fantasía (mentiras y películas que nos montamos en la mente), hacemos las cosas de forma diferente, creando algo nuevo, desarrollando creatividad. De seguir haciendo lo mismo como siempre, utilizando el conocimiento acumulado en la memoria, inevitablemente llegaremos al mismo punto donde nos encontrábamos.

También al depender de un resultado, de que algo sea como deseamos, si no lo conseguimos surgirá la frustración, quitándonos la energía y la fuerza para continuar, hasta dejarnos totalmente desmotivados.
“No tenemos ningún poder sobre el resultado de nuestras acciones, pero sí que lo tenemos sobre las acciones”

Es importante que tengamos claro que no podemos controlar  lo que va a pasar, el resultado. Todo nuestro poder reside en nuestras acciones, que cambian trabajando  pensamientos y sentimientos. Cuando diriges correctamente tu esfuerzo cambiando interiormente todo aquello que no te ayuda y potencias lo que soluciona, finalmente hay algo mágico, pues todo el mundo que te envuelve cambia. No empieces una guerra hacia lo que no puedes cambiar, la situación que vives sin aceptarla,  los hechos, pues la perderás. 
En la vida suelen hacerse las cosas buscando dinero o reconocimiento y cuando no se consiguen surge el conflicto. No digo que no sean necesarios, pues sí que lo son, nos hace falta dinero para vivir y reconocimiento para tener autoestima, salud psicológica y sentirnos bien, lo que digo es que no bases todo en ellos. También puedes hacer las cosas porque es “lo justo y necesario”, de esta manera el regalo, la recompensa la tienes en la acción, sientes que haces lo correcto, lo que toca, confiando en que la vida te dará todo lo que necesites.


Ser felices.

Sergio Cambra.

No hay comentarios: